ANTEPROYECTO
RED
DE COMUNIDADES CRISTIANAS EN RESISTENCIA (RCCR)
Pedro Serrano García
Propósito
Honduras es un pueblo mayoritariamente cristiano, principalmente
católico. Pero la religiosidad recibida desde la colonia española por la Iglesia
Católica, y posteriormente por las iglesias protestantes y evangélicas, ha sido
y es: tradicional, conservadora, espiritualista e individualista. Todavía la
nueva cosmovisión religiosa y social surgida a partir del Concilio Vaticano II,
las Conferencias Episcopales Latinoamericanas (CELAM) y la Teología de la
Liberación, no ha sido suficientemente expuesta a las mayorías cristianas.
No cabe duda que los intereses de las autoridades de las respectivas
iglesias, así como la religiosidad sumisa a los poderes establecidos que
promueven a través de sus estructuras, ritos litúrgicos y acciones pastorales,
favorecen a las clases dominantes, a los partidos de la oligarquía, a las
multinacionales que operan en el país y a las grandes potencias hegemonizadas
por el imperio norteamericano.
Aun así, en Honduras, ciertas minorías cristianas, sin abandonar sus
respectivas iglesias conservadoras, han ido asumiendo la nueva espiritualidad
más en consonancia con la revelación de Jesucristo, que les impulsa a
comprender que el amor a Dios revelado en Jesús, se ha de manifestar en la
liberación de los oprimidos.
Por otra parte, a partir del golpe de Estado perpetrado en el año 2009, ha habido una incorporación masiva de la
ciudadanía hondureña a la Resistencia contra los golpistas y sus sucesores, así
como contra su régimen político oligárquico que se manifiesta con
explotación y represión.
Es evidente que muchas organizaciones populares, sociales, humanitarias
y políticas, en las que se encuentran innumerables cristianos, se han
incorporado al Frente Nacional de
Resistencia Popular (FNRP) y al partido político Frente Amplio de Resistencia Popular (FARP).
Por todo ello, un grupo de cristianos y cristianas en resistencia, opinan
que puede ser beneficioso los aportes más específicos del mensaje cristiano de
liberación en su expresión laica y siempre que sirva al proyecto revolucionario
de la Refundación del Estado; eso sí, sin pretensiones de estériles
proselitismos, ni desfasados confesionalismos; aceptando democráticamente las
decisiones de la base y de los órganos del FNRP.
Para ello, después de varias reuniones, el citado grupo de creyentes pertenecientes
a las organizaciones del FNRP, proponen debatir entre las instancias populares
cristianas, la conveniencia o no, de una Coordinadora
o Plataforma Ecuménica de Comunidades de Base incorporadas a la Resistencia,
desde la opción por la liberación de los pobres y como signo evidente del Reino
de Dios. Provisionalmente y hasta tanto se tomen las decisiones más oportunas,
se la llamaría “Red de Comunidades
Cristianas en Resistencia” (RCCR).
Estimamos que la RCCR puede ser un instrumento útil –aunque modesto–, para
ayudar a la renovación de la Iglesia, a la reforma de la sociedad y a la
refundación del Estado de Honduras.
Anteproyecto
de la RCCR
Identidad
En principio, se descarta que la RCCR deba ser una comunidad o
movimiento más, de los innumerables existentes actualmente en las iglesias
establecidas en Honduras, pues no se ve necesario.
La Red de Comunidades Cristianas en Resistencia, se pretende que sea
una coordinadora o plataforma unitaria de todas aquellas comunidades,
movimientos o denominaciones, tanto católicas como protestantes y evangélicas
que, desde la opción por los pobres, apoyan críticamente a la Resistencia en
Honduras.
El ecumenismo que se propone ha de ser basado en el profetismo bíblico
y en las bienaventuranzas a favor de los empobrecidos que impulsan a los
cristianos al compromiso socio-político por la liberación del pueblo. El
ecumenismo basado en acuerdos entre jerarquías de las iglesias, el ecumenismo
de celebraciones litúrgicas de tipo espiritual, incluso el ecumenismo de
debates teológicos, serán complementarios en la medida que apoyen la
cosmovisión cristiana basada en la liberación de los oprimidos.
Los creyentes en Jesucristo, desde su opción por los empobrecidos, se
declaran en resistencia a toda clase de explotación, opresión y represión. Por
ello, en la coyuntura histórica surgida a partir del golpe de Estado,
apoyaremos y serviremos críticamente al FNRP y sus distintas organizaciones
sociales y políticas, mientras mantengan y defiendan los ideales de una
refundación del Estado basado en la justicia, la libertad, la igualdad, la
solidaridad y la paz. Se trata de recrear la persona humana nueva en Honduras.
Nombre
Hasta que se decida el nombre definitivo, a esta coordinadora de
comunidades la llamaremos Red de Comunidades Cristianas en Resistencia (RCCR).
Principios
Entre otros, la RCCR, pudiera regirse por los valores de la fe
cristiana y justicia social; la liberación integral de los oprimidos; la
democracia participativa tanto política y económica, como cultural y eclesial; la
aspiración a compartir y repartir los bienes equitativamente; la soberanía
nacional integrada a los pueblos que luchan por su independencia en Latinoamérica;
la emancipación de los trabajadores y trabajadoras como aspecto necesario para
la construcción de una sociedad sin clases.
Para la construcción del ser humano nuevo, se consideran importantes
los valores de la honradez, la responsabilidad, la entrega generosa a la causa de
la nueva sociedad, la nobleza en las relaciones sociales y familiares, la sinceridad
y el buen comportamiento. No han de
faltar la aptitud de servicio, de solidaridad, de modestia, de austeridad, de
pacifismo, de generosidad.
Será importante la renuncia a la dominación, al enriquecimiento y a la
fama, como oposición a los antivalores que rigen en el sistema capitalista de
poder, dinero y prestigio.
Desde la RCCR se promoverá un Estado laico garantizador de libertades y
derechos humanos; una Sociedad plural en democracia participativa; así como
unas iglesias que desde la fe en Dios-Amor, contribuyan al bien común, sin
alianzas con los poderes políticos y económicos opresores que imperan en el
país.
Los cristianos en Resistencia, han de priorizar el servicio callado y
humilde, renunciando a la competencia por los puestos de mando, salvo que sea
necesario para el bien común y según opinión mayoritaria.
Objetivo
Contribución a la refundación
del Estado
Animar y ayudar a que las comunidades cristianas que proponen un modelo
de Iglesia de los pobres, contribuyan a la refundación del Estado hondureño,
integrándonos crítica, servicial, desinteresada, generosa y democráticamente a
la Resistencia.
Contribución a la renovación
del cristianismo
Dada la importancia que tiene la religión para el logro del bien común
en la sociedad hondureña, es necesario que las comunidades creyentes en
resistencia, contribuyan a renovar las estructuras conservadoras de las
iglesias, así como a priorizar la liberación de los oprimidos, evitando la
alianza de intereses entre las respectivas jerarquías con los poderes políticos
y económicos oligárquicos de la nación.
Contribución a la reforma de
la sociedad
Para construir una nueva sociedad, será necesario colaborar en la
realización de un ser humano hondureño nuevo, que se rija por los valores del
amor-solidario, desechando los antivalores del individualismo-pasivo. Hay que renovar
la cultura, la política, la economía y la religión, ayudando a los
habitantes de este país a superar todo egoísmo y afianzando el comportamiento
comunitario.
Esta triple contribución, ha de basarse en el testimonio personal
renovado y creyente de los cristianos en resistencia, según el mensaje
profético de la Biblia y los signos de los tiempos, asumiendo los aportes
positivos al ser humano nuevo provenientes de otras filosofías, ciencias,
religiones o ideologías.
Organización
En principio, pudieran contemplarse los siguientes órganos
democráticos:
-Asamblea general,
de los miembros de las comunidades. Será el órgano soberano de la RCCR. Sus
decisiones solo pueden ser revocadas por otra asamblea general.
-Consejo de delegados, donde participan los representantes elegidos por las comunidades
integradas en la RCCR.
-Equipo ejecutivo,
encargado de realizar los acuerdos de los otros dos órganos de base, ya
expuestos.
Asimismo, y cuando las circunstancias lo ameriten, podrán nombrarse
comisiones específicas fijas o temporales.
El funcionamiento de los órganos de la RCCR, han de ser democráticos,
cuyas decisiones se aprueban por mayoría. Asimismo, sus cargos han de ser
temporales, renovables por una sola vez, salvo circunstancias especiales.
-Miembros
En principio se pretende que sean las comunidades, movimientos o
iglesias las que formen parte de pleno derecho de la RCCR.
No obstante, puede considerarse la posible pertenencia de personas
concretas que por su interés en la RCCR, lo soliciten.
-Actividades
-Órgano informativo. Encargado
de transmitir a las bases las noticias de la realidad.
-Escuela de Formación Popular. Para contribuir a la
concientización.
-Celebraciones importantes. Como motivación al compromiso por una
nación mejor.
-Anuncios y denuncias. Cuando las circunstancias lo requieran.
-Acciones. Las que se vean necesarias para fortalecer la RCCR y el
FNRP.
-Relaciones eclesiales y
sociales
Las Comunidades en resistencias integradas a la RCCR, críticamente, han
de permanecer unidas a las iglesias cristianas a las que pertenecen; ayudando a
sus respectivas bases creyentes, a través de las actividades pastorales, a
superar el individualismo y conservadurismo religioso para comprometerse
comunitaria y progresistamente por una nueva sociedad como signo histórico del
Reino de Dios.
Tanto los creyentes como las comunidades en resistencia, se integrarán
y se relacionaran como cualquier ciudadano en las estructuras de la
Resistencia, ya sea el FNRP, el FARP o cual quiera otra organización. Ha de
evitarse todo confesionalismo, sin que por ello dejemos de aportar nuestro
parecer alimentado por la fe cristiana. La fe y la política, estructuralmente han de estar separadas,
relacionalmente han de ayudarse
mutuamente para promover el bien común, éticamente
y sobre la base del respeto han de posibilitar la influencia mutua, siempre
que sea necesario para la construcción del hombre nuevo.
Procedimiento
Para la fundación de la RCCR (o como se la vaya a llamar), es necesario un procedimiento
que, a modo de ideas se ofrece:
Creación de un grupo promotor
Ofrecer la propuesta de la creación de la RCCR a líderes de comunidades
y movimientos, sacerdotes y religiosas, así como pastores y pastoras que estén
cercanas al FNRP, como signo de la nueva cosmovisión religiosa que están
impulsando en sus distintos ámbitos.
Con todos los que les que les parezcan interesante debatir este tema,
crear un grupo provisional y promotor, encargado de estudiar y analizar la
conveniencia, posibilidades, nombre, objetivos y organización de la RCCR.
Elaboración del Proyecto de
la RCCR
Una vez aceptada la idea de la RCCR por el grupo promotor, se invitará
a más organizaciones cristianas en resistencia. Con ellos se elaborará un
anteproyecto para que, después de recoger las opiniones de las bases, se de la
aprobación.
Dado que se pretende que la RCCR sea un organismo vivo, el proyecto
habrá de estar abierto a las modificaciones que sucesivamente se vean
convenientes realizar.
Invitación a otras
organizaciones cristianas
A partir de la aprobación de la RCCR, habrá que invitar por todos los
departamentos a las comunidades y sectores cristianos de las distintas iglesias
a su integración.
Elección democrática de
cargos
Cuando ya se vea conveniente, se disolverá el grupo promotor para dar
paso a la elección de cargos, según lo acordado previamente.
Periodicidad de las reuniones
Para evitar inoperancias e ineficacias, habrá que decidirse por la
periodicidad de reuniones de cada órgano establecido.
Conveniencia de una sede
Se estima necesario lograr una sede, sin que ello sea inconveniente
para la rotación de asambleas y reuniones, si así interesara.
Otra humanidad
es posible.
8 de octubre 2011.